En un mundo que busca reducir su dependencia de las energías convencionales y adoptar fuentes de energía más limpias y sostenibles, los sistemas de almacenamiento de energía en baterías, conocidos como BESS (Battery Energy Storage Systems), se han convertido en un componente esencial en la transición energética. Estos sistemas no solo tienen el potencial de revolucionar la forma en que almacenamos y utilizamos la electricidad, sino que también ofrecen beneficios significativos para el medio ambiente y la estabilidad del suministro eléctrico. En este artículo, exploraremos cómo los BESS están allanando el camino hacia un futuro más verde y sostenible.
El Desafío de la Transición Energética
La transición hacia una matriz energética más sostenible es fundamental para abordar los desafíos del cambio climático y reducir nuestra huella de carbono. Sin embargo, las fuentes de energía renovable, como la solar y la eólica, tienen un problema inherente: su intermitencia. El sol no siempre brilla, y el viento no siempre sopla. Esto plantea un desafío para garantizar un suministro de energía constante y confiable. Aquí es donde entran en juego los BESS.
¿Qué son los BESS y cómo funcionan?
Los BESS son sistemas que almacenan energía eléctrica en baterías recargables y la liberan cuando sea necesario proporcionando una amplia gama de servicios orientados a mejorar la eficiencia, confiabilidad y sostenibilidad de los sistemas de energía eléctrica. Estas baterías son capaces de absorber la energía cuando hay un exceso de producción, por ejemplo, en un día soleado con una gran cantidad de energía solar, y luego liberarla cuando la demanda es alta o cuando no hay suficiente generación renovable disponible.
El funcionamiento de los BESS se basa en tecnología avanzada, como las baterías de iones de litio, que son muy eficientes, confiables y capaces de almacenar grandes cantidades de energía. Los sistemas de gestión de energía supervisan constantemente la carga y descarga de las baterías para garantizar un suministro estable y seguro.
Beneficios de los BESS para la Transición Energética
Los BESS desempeñan un papel fundamental en la estabilización de la red eléctrica brindando el servicio de Regulación Primaria de Frecuencia (RPF)* requerido por el sistema eléctrico. Pueden responder instantáneamente a cambios en la demanda de energía, evitando picos de tensión y ayudando a mantener una red eléctrica confiable y segura.
Almacenar el exceso de energía producida por fuentes renovables durante los momentos de baja demanda permite una mayor integración de estas fuentes en la red eléctrica. Esto reduce la dependencia de los combustibles fósiles y acelera la transición hacia una matriz energética más limpia.
En casos de apagones o emergencias, los BESS pueden proporcionar energía de respaldo inmediata, lo que es esencial para mantener operaciones críticas y garantizar la seguridad pública.
A largo plazo, el uso de los BESS puede reducir los costos de operación y mantenimiento de la red eléctrica, ya que evitan la necesidad de construir infraestructuras costosas para satisfacer la demanda máxima.
El Sistema Chilca-BESS
Uno de los ejemplos más destacados de la implementación exitosa de BESS se encuentra en Perú. ENGIE Energía Perú ha inaugurado recientemente un Sistema BESS de 26.5 MW en su central ChilcaUno. Este sistema, que utiliza tecnología de vanguardia, contribuirá significativamente a la estabilidad de la red eléctrica en el país y permitirá una mayor producción de energía eficiente en el sistema eléctrico. Es, además, el mayor sistema de almacenamiento de energía con baterías en el Perú.
La inversión de ENGIE Energía Perú en sistemas BESS demuestra su compromiso con la sostenibilidad y su liderazgo en la adopción de tecnologías limpias. Este proyecto no solo beneficia al medio ambiente, sino que también fortalece la resiliencia de la red eléctrica peruana, garantizando un suministro eléctrico confiable y sostenible para las generaciones futuras.
La alianza entre la molécula y el electrón
El modelo integrado y único de ENGIE permite que la empresa tenga la capacidad de mantener un crecimiento sostenible y ofrecer a sus clientes un mix energético equilibrado basado en la colaboración entre el electrón (electricidad) y la molécula (gas). Este mix incluye energías renovables, producción flexible y activos de almacenamiento de energía -como los BESS-, así como infraestructuras de gas e instalaciones descentralizadas, elementos clave para respaldar a sus clientes en sus esfuerzos de descarbonización. Es clave comprender que el gas desempeña un papel fundamental en este proceso, garantizando la seguridad y asequibilidad energética necesaria para un futuro más sostenible, junto a otros activos flexibles.
En conclusión, las Battery Energy Storage Systems (BESS) son elementos cruciales en la transición hacia una matriz energética más sostenible. Permiten la integración efectiva de fuentes de energía renovable, estabilizan la red eléctrica y brindan respaldo en situaciones de emergencia.